Preparando un informe especial sobre un particular Congreso partidario del PJ bonaerense en la década del 70, llegué a Luis, uno de los pocos testimonios con ganas de hablar pero que además estaba vivo, ya que la mayoría de los protagonistas de esos tiempos ya perdieron la vida. Gracias a unos amigos que viven en Dock Sud, pude contactarlo y convencerlo.
En esos años el hombre había sido custodio de distintos dirigentes de la Unión Obrera Metalúrgica, el gremio más fuerte y emblemático de esa época. Comenzamos hablando sobre aquel congreso, pero su historia era tan rica e interesante, que me pareció que su testimonio debía ser más amplio para poder brindarnos su mirada de los hechos dramáticos que atravesó la Argentina en ese momento. Desde ya sabiendo que era una visión parcial y de parte, pero que siempre fue muy poco escuchada y visibilizada.
Luis nació en 1950 en Avellaneda, era el mayor de seis hermanos que vivían en Dock Sud en la parte de atrás de la casa de unos yugoeslavos. “Mi viejo les alquilaba unas piecitas y una cocina, el baño era compartido, todo costaba mucho, él trabajaba en la UOM y era militante de la resistencia peronista, cada tanto caía en cana y mi vieja con mi abuelo tenían que ir a sacarlo” dice orgulloso mientras se prepara para contestar las preguntas.
¿Cómo entraste en el mundo de la UOM?
Mi viejo laburaba en el gremio y tuvo un accidente que se le complicó por la diabetes, con la desgracia que perdió una pierna, como yo era el más grande de mis hermanos y me veía un pibe medio sin rumbo le pidió una mano al beto Imbelloni que era su amigo y así fue como empecé a laburar de “che pibe” haciendo mandados a los 16 años.
¿Cómo llegaste a ser custodio de dirigentes sindicales, lo que se denomina un “culata”?
Era rápido, vivo, me fui haciendo hombre ahí adentro, pensá que yo entré en el 66, unos meses antes había sido lo de García (Rosendo) en La Real, eran tiempos difíciles, mi mayor virtud siempre fue ser obediente y leal con quienes también lo eran conmigo, pero además tuve la suerte que grandes tipos me fueron educando y formando, dándole un sentido a mi vida, entonces entendí que debía honrar a mi viejo y el gremio se transformó en mi vida. A mediados del 70/71 ya era parte de los muchachos que cuidábamos a Luis Guerrero, que era nuestro referente en Avellaneda.
José Ignacio Rucci y Luis Guerrero
¿Siempre se cuestionó que los dirigentes sindicales tuviesen custodia, vos como tomabas eso, en esos años se veía igual?
La verdad no sé que pensaba la gente, dentro de mi mundo que era el gremio, era una cuestión normal, hay que ponerse en el contexto de ese tiempo, era todo un quilombo, las diferencias políticas se dirimían con plomo, había atentados todo el tiempo, en mis primeros años laburando mataron al lobo (Vandor) que era el secretario general nuestro a nivel nacional, no era joda, como no íbamos a cuidar a nuestros dirigentes, estamos locos.
¿Cómo se vivió internamente el asesinato de Vandor?
Si te digo que no nos sorprendió, ¿vos me crees? Sabíamos que podía pasarle a cualquier dirigente gremial y el lobo no era la excepción, lo que si nos tomó por sorpresa fue la forma en la que lo hicieron. Mira, 50 años después llego a la conclusión que eso me sirvió, porque a partir de ahí se extremaron las medidas de seguridad y pude hacer carrera. Pero dentro del peronismo cualquier perejil sabía que Vandor no tenía futuro, no te digo que supiésemos que lo iban a matar, pero pensábamos que era un muerto político porque se la pasaba desafiando a Perón y eso caía mal incluso dentro de la UOM, también se sabía que era allegado a los milicos, entonces creíamos que apenas cambiase la mano lo iban a rajar del gremio los propios compañeros.
En noviembre del 72 tras 17 años de exilio regresa al país el general Perón, ¿Qué recuerdos tenés de ese día?
Hermosos, de las cosas más lindas que me tocaron vivir, fue una verdadera fiesta popular, las diferencias que teníamos dentro del peronismo y con quienes se decía peronistas para coparlo, ese día quedaron de lado, es difícil describirlo porque se me pone la piel de gallina, preguntale a otro que haya estado y te va a decir lo mismo que yo.
A los pocos días del regreso del general, ya se sabía que él no iba a participar de las elecciones de marzo del 73 por la famosa cláusula que le había puesto Lanusse, ¿Cómo se vivió eso en la UOM?
Desde el movimiento obrero organizado nosotros apoyábamos la candidatura de Cafiero (Antonio), ojo, no es que era santo de mi devoción, pero era quien venía del viejo peronismo y nos garantizaba que íbamos a tener un papel importante en el futuro gobierno. En Cámpora no confiábamos porque era un chanta, también venía de antes y sus únicos méritos habían sido ser un chupamedias, además sabíamos que había arreglado con los “zurdos”, lo que se discutía es que rol íbamos a tener cada sector en el futuro, se discutía poder y como dije antes, en ese momento los fierros no eran mal vistos.
¿No es raro todavía decirle zurdos a lo que se denominó la tendencia, que no solo incluía a los grupos armados sino también a millones de jóvenes de la JP?
Para nosotros eran zurdos, no tenían nada que ver con el peronismo, hablaban distinto, se vestían distinto, pregúntale a cualquier que haya vivido esa época y te va a decir lo mismo.
¿Pero vos tenías la edad de ellos, en 1972 tenías solo 22 años, nada te gustaba de la juventud peronista?
La minas jejeje, fuera de broma no sentía que fueran peronistas como yo, mi viejo estuvo en el gremio toda su vida, cuando se accidenta yo entro a seguir su legado, la UOM fue sinónimo de lucha, de resistencia, yo me crie con eso, era un pibe respetuoso, no le faltaba el respeto a los mayores, estos eran maleducados, pibitos bien que le querían explicar el peronismo a tipos que habían dado la vida por Perón y que cuando te perseguían por ser peronista, sus padres vivían lo mas bien y ellos hacían su vida normal en buenos colegios, entonces mira si no les íbamos a tener bronca.
¿Cuándo te diste cuenta que se iba a desmadrar todo?
En la transición entre las elecciones y que asume Cámpora (NR: del 11 de marzo al 25 de mayo de 1973). Si bien había felicidad en el pueblo por la vuelta del peronismo, nosotros adentro nos preparábamos para una guerra, sabíamos que los zurdos le iban a copar el gobierno al inútil ese y que no se lo podíamos dejar pasar porque nos llevaban puestos.
¿O sea reconoces que ustedes hicieron todo para voltearlo?
Se voltea solo, el mes que estuvo como presidente fue lamentable, una anarquía absoluta, todos los días había toma de fábricas, de ministerios, el pueblo había votado al peronismo para vivir en paz, no para que estos delirantes anduviesen a fierro limpio en las calles, por Luis Guerrero sabíamos que Perón estaba re caliente y que el inútil de Cámpora tenía los días contados.
Entonces lo de Ezeiza estuvo preparado..
¿Preparado en qué sentido?
Ustedes emboscaron a la tendencia y se produjo una masacre..
No, pará, cuando decís ustedes no se a quien te referís, la seguridad del acto estaba a cargo del loco ese de Osinde, nosotros ocupábamos el centro frente al palco oficial porque éramos el principal gremio de la Argentina, ¿Quién tenía más mérito que la UOM para ocupar ese lugar? Nadie. A los costados estaban los compañeros de Smata y la UOCRA. Pero nosotros no empezamos nada, lamentablemente siempre se cuenta todo distorsionado, el problema arranca cuando llegan los zurdos estos (NR: se refiere a Montoneros) con una columna importante y quieren copar el lugar, ubicarse frente al palco, ahí se desmadra todo.
Pero todos los testimonios coinciden en que ellos prácticamente no contaban con gente armada y ustedes tenían un arsenal
Otra vez con ustedes, un arsenal tenía la gente del ministerio (NR: se refiere a la gente de López Rega), los de la CNU (Concentración Nacional Universitaria), o la gente de Brito Lima (Comando de Organización), nosotros teníamos los fierros justos y necesarios que se llevaban a cualquier marcha, pero que carajo tiene que ver la UOM con esa gente, que tuviesen también problemas con los zurdos no hace que seamos cómplices de nada, ponernos en la misma bolsa es una falta de respeto. Hoy en día ¿Dónde está esa gente, que fue de su vida, que queda de la CNU o de la CdO, o de los Montoneros mismos? No queda nada porque fueron todos infiltrados por derecha o izquierda dentro del peronismo, en cambio la UOM sigue siendo uno de los principales gremios del país y no es el número uno porque casi todos los gobiernos destruyeron la industria, por eso hay que hablar con propiedad, somos los trabajadores metalúrgicos organizados, siempre fuimos leales a la doctrina de Perón por eso nosotros seguimos y ellos dieron vergüenza
No dije que fueran lo mismo, pero te reformulo la pregunta, ¿Qué contacto tuvieron ustedes con la Cdo, la CNU o la gente de López Rega?
El justo y necesario que había que tener, hasta ahí, pero por el accionar de ellos que hablen ellos, como te digo, esta gente en el peronismo no habían existido antes y no existieron después, yo hablo por mi, pero si voy a defender el honor de la UOM, voy a defender a la seccional Avellaneda que es donde me formé, donde hubo un dirigente excepcional como Luis Guerrero, o compañeros como el beto Imbelloni, a quien le debo mucho, un tipo increíble injustamente acusado y perseguido por el gobierno de Alfonsín, ni hablar de Juancito Destefano, otro tipo sensacional, muy generoso, o el gallego Iglesias (Herminio) que también fue perseguido por los radicales, esos son los conocidos, pero todos éramos así, leales, valientes y peronistas.
¿Ahora hay una corriente que en su mayoría son jóvenes que reivindica al gobierno de Isabel Perón, vos que viviste esos años y que además tu gremio tuvo un rol importante tras la caída de López Rega, que opinión y recuerdos tenés?
Primero te quiero aclarar que al mayordomo (López Rega) lo rajamos nosotros y no por cuestiones de poder como dicen por ahí, era insostenible. Seguramente tus padres te habrán contado del rodrigazo, le hicieron mierda el bolsillo al pueblo, era insostenible que un gobierno peronista tome medidas que ni Alsogaray proponía, por eso hicimos un paro general, copamos Plaza de Mayo y pedimos públicamente la cabeza de quien lo puso. Así fue como se gestó la caída de ese tipo que le hizo mucho daño al país.
Masacre de Ezeiza
¿Pero ahí Lorenzo Miguel se pega a la presidenta y pone funcionarios?
Lo que quiso hacer el loro fue salvar al gobierno peronista que venía en caída libre, pero no había mucho por hacer, en ese momento nosotros hablábamos de peronizar el gobierno, pero ya era tarde, los milicos habían copado todo, la presidenta les daba espacio pensando que así iba a evitar el golpe, pero mucho no pudimos hacer. Nosotros la defendimos hasta el último día como correspondía, pero hoy a la distancia, fue un error que ella estuviese en ese lugar, no estaba preparada y menos para el quilombo que era Argentina en ese entonces, con muertos, bombas, inflación. Pero ya está, nosotros fuimos leales con la patria y el movimiento.
¿Cómo viviste el golpe?
Nosotros imaginábamos que era inevitable, yo estaba en una etapa distinta, había formado mi familia, mi hijo más grande era recién nacido, me había ido a vivir a Ciudadela porque mi mujer es de ahí y por eso ya no laburaba con Luis (Guerrero) en Avellaneda, estaba haciendo cosas con los compañeros de 3 de Febrero. Nos mandamos varias cagadas y pensábamos que nos iban a ir a buscar, porque apenas asumen los milicos intervienen el gremio, nos encarcelan dirigentes. Pero pasaba el tiempo y nada, yo me reciclé como administrativo, pero en noviembre del 76, alguien que prefiero evitar nombrar habla de más y nos chupan a todos. Me tuvieron 10 días desaparecido en el Pozo de Quilmes y después me blanquean, me mandaron a Caseros (cárcel), recién recuperé la libertad en agosto del 84.
¿Qué podes contar de esa experiencia horrible que te tocó vivir?
Primero que nada, quiero aclarar que no soy ningún mártir ni nada por el estilo, como te dije antes, yo me mandé cagadas y me tocó perder, debía pagar el precio, pero de ahí a que nos tengan en un chupadero, que nos dieran maquina (tortura con picana eléctrica) hay un abismo, la verdad es que pensaba que no iba a salir vivo, desde ahí agradezco todos los días al señor por estar vivo, por haber podido volver a ver a mi hijo y poder ser padre nuevamente.
¿Qué cagadas te mandaste, tienen que ver en esto de no querer fotos o que se publique tu nombre completo?
Lo de mi nombre y las fotos es por mis nietos y por mis hijos, no tiene sentido que algún día los señalen en la calle, como le pasaba al mayor mío, por eso accedí a contar las cosas sin pelos en la lengua, pero resguardando eso. Cuando los milicos me blanquean me procesan por robo calificado y secuestro extorsivo, finalmente soy condenado por lo primero, no me quejo, porque mis cagadas tuvieron que ver con eso, lo de secuestro fue para cargarnos a nosotros las aberraciones que habían hecho ellos.
¿Qué país encontraste al salir de Caseros 8 años después?
Un país devastado encontré, los milicos lo habían hecho mierda, lo lamentable que después mucho no cambió, por suerte puede volver al gremio en 3 de Febrero y tener un trabajo con el cual se complicó llegar a fin de mes, pero estaba tranquilo, mi mujer fue una santa que me esperó, pero sufrí mucho porque no pude ver crecer a mi pibe más grande, tuve dos más y los malcrié demasiado, nunca pude superar esa culpa.
¿Y dentro del peronismo fueron años duros, más para el sindicalismo y la UOM en particular?
Muchos compañeros nos miraban raro, como que querían escondernos, lo castigaron feo al gallego (Herminio Iglesias), fue difícil, por eso también opté por hacer mi laburo en el gremio y nada más. Más adelante cuando el compañero Hugo Curto se lanza como intendente lo apoyamos y apenas gana me fui a laburar a la municipalidad como capataz de un grupo de maestranza hasta que pude jubilarme. Volví a vivir con lo justo como cuando era pibe, pero con la tranquilidad que no me iba a estar cagando a tiros por cualquier cosa.
¿Cómo viste bajo tu óptica peronista los gobiernos de Menem y los del kirchnerismo?
Como laburante del gremio metalúrgico, el del turco lo viví como una traición, pasamos de ser el sindicato más grande del país a uno más, hay cosas que destaco como la estabilidad, pero el costo fue muy alto. La realidad es que por el loro Miguel que había estado preso con él en el buque, sabíamos que era un chanta, poco confiable y que durante el tiempo que estuvo preso se la pasaba llorando, los compañeros mismos le decían María Magdalena. El de Néstor Kirchner me gustó, creo que fue un buen gobierno, los de Cristina tuvieron cosas buenas al principio, después la noté muy perdida, mucha corrupción, mucho caos, el peronismo tiene que ser garante de un país en paz.
Para cerrar, ¿Qué sentís cuando la principal agrupación juvenil del peronismo lleva el nombre de Cámpora y cantan a favor de los montoneros?
Tristeza, que voy a sentir. Cámpora fue un inútil que le hizo mucho daño al país y al peronismo, yo les recomendaría que si dicen ser peronistas, que sigan la doctrina de Perón y averigüen porque este lo degradó tras asumir su presidencia, que no se queden en que lo puso de candidato, porque cuando tuvo que demostrar su capacidad, terminó pasando lo que dijimos, que le iban a copar el gobierno los “zurdos”. Por eso siempre les digo, si son peronistas como dicen, no le pueden poner el nombre de un tipo que Perón no quería. Con respecto a los montoneros, opino lo mismo que dije de la CNU o del CdO, no tenían historia antes de los 70 ni la tuvieron después, usaron el peronismo para tratar de imponer ideas que de otra forma no hubiesen tenido la chance de hacerlo. ¿Qué quedó de ellos hoy? Un Firmenich, una Patricia Bullrich, mira los representantes que les quedaron, a esta chica la escuchas hablar hoy y está a la derecha de lo que era la gente del mayordomo (López Rega), pero en los 70 nos decía burócratas a nosotros y era de izquierda. Por eso siempre digo, fueron y son arribistas, el peronismo es otra cosa.
